por Yuri Baranchik. En canal de Telegram del autor. Fecha de publicación original: 23 de mayo de 2024. Traducción verificada por Comunidad Saker Latinoamérica
Agregaré inmediatamente a la primera parte, porque después de que las Fuerzas Armadas de Rusia realizaron ejercicios de fuerza nuclear el 21 de mayo en la base del Distrito Militar del Sur (como resultado de lo cual se escribió la primera parte, aquí), Francia realizó sus propios ejercicios.
El 22 de mayo, la Fuerza Aérea Estratégica (FAS) llevó a cabo la Operación Durandal con el primer lanzamiento de prueba del misil de crucero con capacidad nuclear ASMPA mejorado (ASMPA-R).
El lanzamiento se realizó desde un caza Rafale B. El ASMPA-R tiene una longitud de unos cinco metros, una masa de 800 kg y vuela a una velocidad de al menos Mach 2 gracias a un motor estatorreactor, capaz de maniobrar activamente y volar a gran velocidad, a altitudes bajas y ultrabajas. Cuando está equipado con una ojiva nuclear de 300 kilotones, su alcance es de unos 500 km.
Si el objetivo de nuestras demostraciones era alentar a los oponentes a ser pacíficos, entonces el efecto resultante es claramente el opuesto de lo esperado. Francia realizó sus ejercicios con armas nucleares tácticas al día siguiente. Y a juzgar por la retórica en torno a la “revisión de las fronteras” en el Báltico, el nivel de agresión y militarización en Occidente no hará más que aumentar. Ya hay llamados de Finlandia para cerrar completamente el Mar Báltico a los petroleros “ilegales” que transportan petróleo ruso.
¿Qué conclusión se desprende de esto? Que cualquier demostración de “te podemos destruir” debe ser muy convincente. El magro video del Ministerio de Defensa, donde viajan los Iskanders y despegan aviones con Khinzal (daga), impresionó a pocas personas, incluso dentro del país: todos los días se pueden ver muchos videos de lanzamientos de misiles, ¿qué podemos decir de los generales occidentales?
Me gustaría creer que para la segunda fase de los ejercicios (la primera ya está completa) hemos guardado algo que realmente puede ayudar a Occidente a recuperar la sobriedad. Si es necesario, sabemos cómo hacerlo: en 2015, las capacidades del “Kalibr” quedaron inesperadamente demostradas a Occidente al disparar contra terroristas en Siria desde el Mar Caspio.
¿Por qué nosotros, por ejemplo, y ésta es sólo una de las opciones posibles, no disparamos desde el Mar Negro a través del Mediterráneo, eligiendo la zona de impacto del misil en algún lugar al noroeste de Gibraltar, bueno, allí, no lejos de la zona marítima de Bretaña. Dejemos que los misiles vuelen estrictamente en el espacio aéreo internacional, con nuestra notificación oficial a todas las aerolíneas que operan vuelos sobre el Mar Mediterráneo. Por cierto, nuestros aviones no vuelan allí. Y ahora ya está más cerca, ya hace calor.
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