por Oliver Ndenkop, en La Haine. Traducido del francés por Carles Acózar para Investig’Action. Extractado por La Haine
Desde 2011, el África ‘francesa’ (Françafrique) ha sufrido estragos en varios países africanos: la República Centroafricana, Costa de Marfil, Mali, Libia.
¿Por qué decidió organizar una importante conferencia sobre el caso Gbagbo?
Michel Collon: ¡Con las limitadas fuerzas de nuestro equipo de Investig’Action, es imposible tratar cada una de estas intervenciones como debería ser! He trabajado mucho sobre la agresión contra Libia, produciendo un libro y una película corta. Era verdaderamente una guerra contra toda África.
Pero Costa de Marfil es también un ejemplo flagrante de injerencia y neocolonialismo. Encarcelar en La Haya a un presidente que solo quiso defender la independencia de su país sirve para intimidar a todos los que en África querrían liberarse de la África francesa.
En mi opinión, se ha podido hablar muy poco y gran cantidad de público ha mantenido una impresión confusa, fabricada por los medios de comunicación. Las técnicas de satanización mediáticas han funcionado bien. Así que, comprobar los hechos con testigos directos me parecía indispensable para sensibilizar a un público más amplio y empezar a cambiar el equilibrio de fuerzas.
¿Cuál es la idea general que se desprende de los testimonios recogidos?
MC: Bueno, nuestros 17 principales testigos han proporcionado una increíble cantidad de hechos concretos, de revelaciones y de análisis pertinentes. Yo mismo he aprendido mucho.
La Francia de las multinacionales ha violado el derecho internacional, organizado directamente la manipulación de las cifras del escrutinio (Gbagbo había ganado, sin ninguna duda), la corrupción de políticos, el saqueo del cacao y otros recursos, un verdadero golpe de estado con secuestro político. Consideran que África les pertenece y que todo gobierno debe obedecerles. Desde luego, sobre Gbagbo, el orden del día de los consejos de ministros se decidió en París, ¡eso lo dice todo!
Los responsables son Sarkozy, Villepin, Alliot-Marie, Juppé…, y su política fue continuada por Hollande, Valls y Kouchner. Pero los patrocinadores reales son una serie de multinacionales francesas y otras sobre las que escuchamos sus malas acciones con precisión.
El caso Gbagbo es muy seguido en África y más allá. ¿Ha tomado disposiciones para una amplia difusión de los testimonios recogidos?
Sí, aunque nuestros recursos sean limitados, como ya dije, hemos velado para grabar en las mejores condiciones. Con el Comité Organizador, Investig’Action prepara un DVD. Creo que va a ser una herramienta valiosa para que todo el mundo pueda informarse sobre todo lo que los medios no hablan nunca.
Laurent Gbagbo y sus próximos son perseguidos en la Corte Penal Internacional y en Costa de Marfil. Mientras tanto, Alassane Ouattara y Guillaume Soro no están inquietos.
¿Cómo entender esta política de doble rasero, dos pesos y dos medidas?
Los abogados nos han demostrado claramente que el proceso es una farsa, que la instrucción del Procurador es totalmente un encargo, y que a pesar de sus enormes recursos, el dossier está vacío. En realidad, el proceso se ha alargado mucho para impedir el regreso de Laurent Gbagbo a la vida política.
El FMI no escatima elogios acerca del régimen de Ouattara que tiene una alta tasa de crecimiento (8,6% en 2016). ¿Quiere esto decir que la salida de Gbagbo fue algo bueno para la economía de Costa de Marfil?
¡Son cifras falsas! El ingeniero Ahoua Don Mello, antiguo ministro, ha demostrado que estas cifras están falseadas: el “crecimiento” proviene del sector de la construcción, completamente financiado por la “ayuda al desarrollo”, beneficiando a las multinacionales francesas del BTP. Mientras que los sectores creadores de riqueza se han desplomado un 10% y hasta el 22% para el petróleo.
La conferencia de París se llevó a cabo en la víspera de la primera vuelta de la elección presidencial francesa. ¿Una mera coincidencia o una estrategia?
Una coincidencia, pero iba bien para iluminar el problema internacional. Por otra parte, entrevistamos a los once candidatos sobre lo que pretendían hacer a propósito de este proceso, del encarcelamiento de Gbagbo y en general sobre el África francesa, incluyendo el franco CFA (franco Comunidad Financiera Africana, moneda de ex-colonias francesa, ligada al franco francés. Nota del Editor). Sólo tres respondieron, con buenas posiciones de Mélenchon y de Asselineau …
La llegada de Emmanuel Macron al Elíseo, ¿puede cambiar algo en el África francesa?
Bueno, es el tercero en haber contestado. Pero no cambiará nada de nada. No respondió a las preguntas, pero envió un texto con generalidades y blablabla sobre la continuación de la buena colaboración entre Francia y África. Al igual que todos los presidentes precedentes de hecho.
Entre los partidarios del Sr. Macron está Bernard Henry Levy. A la vista de su papel en el caos libio, ¿no hay que temer otras guerras imperialistas en África bajo Macron?
Por supuesto. Macron es un beligerante, alineado con los EEUU, agresivo hacia los palestinos y peligroso para África. Levy es un vendedor de propaganda de guerra que se envía a todas partes donde es necesario justificar una agresión colonial.
¿Qué opina de la actual movilización contra el franco CFA?
Muy positiva. Es importante que todo el continente se una contra algunos objetivos precisos. Así, el franco CFA es un instrumento central para mantener la tutela; existen buenas razones para apuntar a ese torniquete real que presiona a los pueblos.
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